5 tecnologías y 5 tendencias en el sector del turismo online

Si tuviéramos que destacar un sector que haya demostrado eficacia, flexibilidad y capacidad de adaptación al entorno digital, seguro que muchos coincidiríamos en señalar el turismo y el ocio. Casi sin darnos cuenta, nos hemos olvidado de la agencia de viajes de nuestro barrio, de las recomendaciones gastronómicas del periódico dominical, de las eternas esperas para comprar la entrada de un concierto… y solo unos pocos nostálgicos siguen apostando por sus inseparables guías de viaje.

Buscadores, comparadores, redes sociales, apps de geolocalización… configuran un nuevo escenario en el que muchas empresas han encontrado un universo de oportunidades. Pero este nuevo escenario también ha supuesto una auténtica revolución para el consumidor, cuyas opciones de control han aumentado de forma exponencial.

En España, el turismo ha conseguido evolucionar y crecer en el canal online de forma especialmente significativa. Sin embargo, hay determinados elementos en los que todavía es necesario trabajar, porque no olvidemos que el mundo digital está siempre vivo, es cambiante y, en este caso, son cada vez más los actores que participan en él.

La incorporación de nuevas tecnologías de la información y la comunicación, el business intelligence y la posibilidad de obtener información cualitativa de los clientes que ayude en la toma de decisiones de las empresas, son sólo algunos de los aspectos en los que todavía hay mucho recorrido.

Tenemos que dejar de pensar en volumen y pensar en calidad para conseguir un turismo innovador y sostenible, en aras de lograr una mayor competitividad del sector en nuestro país.

En este marco, la tecnología juega un papel crucial y actúa como impulsora de algunas de las tendencias que definirán el futuro de esta actividad, y que en el entorno digital (ya sabemos) es presente. ¿Cuáles son estas tecnologías? ¿Qué incidencia tendrán sobre la estrategia de las empresas del sector? Son muchas y de diverso alcance, y su importancia dependerá de cada caso en concreto, pero la experiencia nos dice que en la agenda de la transformación digital, al menos, tendremos que tener presentes 5 tecnologías y 5 tendencias:

Si hablamos de tecnología…

  • Cloud Computing.  Las plataformas basadas en la “nube” se han convertido en el eje de cualquier organización y más en las empresas turísticas, muchas de ellas internacionales, con diferentes sedes y estrategias multicanal.
  • Big Data. El “oro de la era digital” es un activo de incalculable valor precisamente en este sector. El reto ya no es acceder a la información, es saber gestionarla e interpretarla para tomar decisiones estratégicas.
  • Social Media. Canales de comunicación que pueden ser nuestro mejor aliado o convertirse en nuestro peor enemigo. En muchos casos la opinión de los usuarios sobre una compañía o un destino es más efectiva que una ambiciosa campaña de publicidad. Personalización, inmediatez e interactividad: las redes sociales han llegado para quedarse.
  • Mobile. Espacio en el que los servicios turísticos y de ocio encuentran una demanda activa. Si el crecimiento del e-commerce ha sido y es constante, el del m-commerce es y será fulgurante. Todo al alcance de la mano, sin límites de tiempo, espacio y con cada vez mayores alternativas de pago. No hay barreras.
  • Geolocalización y realidad virtual. Herramientas que mejoran la prestación del servicio, que ofrecen una nueva experiencia al cliente. Pero que también suponen para las empresas una valiosa información sobre el comportamiento de sus públicos, sus preferencias… Integrada con el big data, esta tecnología ya se ha posicionado en el centro de muchas estrategias y hablaremos de ella cada vez más.

Si hablamos de tendencias…

  • Conocemos a nuestro cliente. Su edad, su género, dónde vive o su nivel económico es útil para las empresas turísticas. Pero, lo que de verdad les interesará a partir de ahora son sus emociones, sus expectativas, lo que les apasiona y lo que les causa rechazo. Con esta información es con la que de verdad se configura esa oferta personalizada y única.
  • Escucha y respuesta activa. Monitorizar y rastrear cualquier tipo de comentario o información sobre una compañía o marca era algo que ya estaba incorporado en prácticamente todas las  estrategias de comunicación. Pero esto es sólo una parte, establecer un feedback y una respuesta en real time ya no es un plus, es casi una obligación.
  • Experiencias únicas. Cada vez es más difícil sorprender al consumidor, que acumula mayor número de experiencias que, o bien ha vivido en primera persona o las conoce a través de terceros (la información fluye). Eso provoca, como consecuencia, un mayor nivel de exigencia y que sea más difícil cumplir con las expectativas. En este campo despuntan tendencias como los destinos inteligentes, en los que el usuario se integra con el entorno e interacciona de forma natural con él; o el tantas veces mencionado “Internet de las cosas”, que ha abierto un abanico inmenso de posibilidades para que las empresas turísticas se relacionen con el cliente.
  • Servicio 360º. Cambia el modelo de negocio y, ante todo, se amplían las posibilidades de crecer, de ofrecer productos complementarios, de crear nuevas líneas… Para las empresas turísticas no sólo es una oportunidad, también puede ser una necesidad porque sus usuarios esperan de ellas, en muchos casos, un servicio 360º.
  • Testar en “real time”. La tecnología y el mundo digital permitan testar, casi en tiempo real, si estamos haciendo bien las cosas. Esto constituye una ventaja, pero también un reto. El consumidor se ha familiarizado con la inmediatez del entorno y eso nos exige que de forma instantánea se ofrezcan soluciones a los posibles errores o problemas que surjan. ¿Cuántas empresas turísticas están realmente preparadas para ello?

El carácter pionero y el posicionamiento del sector turístico en el mundo online es un arma de doble filo. Por un lado, ya se ha recorrido gran parte del camino y, a priori, la transformación digital es un proceso totalmente interiorizado. Sin embargo, el punto de partida obliga a las organizaciones a ser más innovadoras y arriesgadas que en otros sectores en los que queda todo por hacer. Por ello, mantenerse en las primeras líneas de salida es una de las mayores garantías de éxito. ¿En qué posición te encuentras tú?

Este artículo ha sido publicado en Digitalmarketintrends.es

Publicado por

Luis Ortega Muntané

Socio Director en Stratesys