CUANDO LA MOTIVACIÓN DEL TALENTO SE CONVIERTE EN UN JUEGO | ENTREVISTA A CÁNDIDA MARTÍN EN “ABC EMPRESA”

¿Qué importancia está adquiriendo el gaming como herramienta para los equipos de recursos humanos?

Incorporar elementos de juego en procesos y actividades de Recursos Humanos, es algo que lleva años revolucionando la manera en la que gestionamos y desarrollamos el talento en las organizaciones. Podemos mencionar algunos ejemplos de casos de uso para procesos clave de RRHH.

Formación y desarrollo

El ejemplo más claro y que todos, o casi todos, ya conocemos y que seguramente hemos experimentado como alumnos en alguna formación en nuestra empresa. La gamificación ha transformado el mundo de la formación al ofrecer a los empleados experiencias mucho más dinámicas y efectivas. En Stratesys, tenemos el reto de conseguir que nuestros clientes adopten nuevas tecnologías de forma rápida y efectiva. Para este tipo de desafíos, nos apoyamos en simulaciones y ejercicios interactivos que mantienen a los empleados enganchados y motivados durante toda la formación

Reclutamiento y Selección

Todas las organizaciones estamos en una lucha constante por conseguir talento. Al incorporar elementos propios del mundo del juego, como desafíos interactivos, niveles y recompensas, podemos generar ese momento wow durante el proceso de selección que consiga captar a un potencial candidato. Además, mediante simulaciones diseñadas para replicar situaciones laborales, los equipos de RRHH pueden obtener información detallada sobre las habilidades y competencias de los empleados en áreas como la resolución de problemas, la toma de decisiones, la creatividad y la colaboración.

Identificación y Desarrollo de Talento

El gaming también puede ayudar a identificar empleados con alto potencial. A través del juego podemos observar su comportamiento y desempeño en situaciones simuladas, lo que nos permite anticipar como podrían actuar ante un desafío real.

Además, otros beneficios de utilizar actividades gamificadas en las organizaciones, pueden ser; aumentar la motivación y el compromiso, fomentar el trabajo en equipo, proporcionar feedback inmediato a los empleados, reducir el estrés en el entorno laboral, fomentar la innovación y la creatividad y mejorar la cultura organizacional.

 

¿Resulta eficaz para motivar a los equipos?

Sí, la gamificación puede ser una herramienta poderosa para motivar a los equipos en un entorno laboral.

Por un lado, aplicar mecánicas de juego como puntos, insignias y niveles, incentiva a los empleados a alcanzar metas y a superar desafíos para obtener estas recompensas y reconocimientos, lo que puede impulsar además su desempeño y productividad.

Además, la gamificación puede proporcionar claridad en los objetivos y retroalimentación inmediata, lo cual es crucial para mantener la motivación de los equipos. Los empleados pueden ver su progreso en tiempo real y recibir feedback instantáneo sobre su desempeño, lo que les ayuda a entender mejor cuáles son sus fortalezas y áreas de mejora.

Por otro lado, muchos juegos y actividades gamificadas requieren colaboración y trabajo en equipo. Estas actividades pueden ayudar a fortalecer las relaciones entre los empleados, mejorar la comunicación y fomentar un ambiente de trabajo colaborativo.

Por último, las organizaciones cada vez más se preocupan por el bienestar y satisfacción de sus empleados. Gracias a la gamificación podemos reducir el estrés asociado con tareas monótonas o desafiantes al hacerlas más atractivas y entretenidas.

 

¿En qué situaciones se suele recurrir a este tipo de herramientas?

Las empresas recurren a la gamificación en diversas situaciones dependiendo del objetivo que quieran alcanzar. Estos son algunos de los momentos clave en los que la gamificación puede ser especialmente útil:

Onboarding y formación de nuevos empleados

Durante el proceso de incorporación de nuevos empleados, la gamificación puede hacer que la integración sea más interactiva y agradable. Los nuevos empleados pueden completar desafíos, obtener insignias y acumular puntos al aprender sobre la cultura de la empresa, las políticas y los procedimientos.

Además, puede transformar los programas de formación inicial, haciéndolos más dinámicos y efectivos. Los juegos y simulaciones pueden ayudar a los nuevos empleados a aprender y retener información crítica de manera más eficiente.

Desarrollo Continuo de Habilidades

No pensemos solo en formaciones puntuales en la trayectoria de un empleado. La gamificación puede ser utilizada en programas de formación continua para mantener a los empleados comprometidos y motivados. Las simulaciones, los juegos de rol y los concursos pueden ayudar a desarrollar y perfeccionar habilidades específicas.

Además, en Stratesys cuando queremos mantener a los empleados actualizados con nuevas tecnologías, regulaciones o procedimientos, que es algo imprescindible en nuestro negocio, nos apoyamos en la gamificación, haciendo que el proceso sea menos tedioso y más motivador.

Innovación y Creatividad

Todas las organizaciones tienen como objetivo estratégico la capacidad de innovación en su negocio para seguir siendo competitivos. Cada vez más las empresas organizan hackathons, donde los empleados trabajan en soluciones creativas para problemas específicos, incentivándolos con premios y reconocimientos.

Además, también podemos utilizar la gamificación para conseguir recopilar sugerencias e ideas innovadoras de los empleados, recompensando las contribuciones más valiosas.

Cambio Cultural y Transformación Organizacional

Reforzar los valores de la empresa sigue siendo una prioridad en las áreas de Recursos Humanos. La gamificación puede ayudar a alinear a los empleados con los valores y la misión de la empresa, mediante juegos y actividades que reflejen y refuercen estos principios.

Y no podemos olvidar que todas las empresas estamos en continuo cambio. Durante periodos de cambio organizacional, la gamificación puede facilitar la adaptación y aceptación por parte de los empleados, haciendo que el proceso de cambio sea más manejable y menos estresante.

En Stratesys queremos que nuestros clientes siempre cuenten con nuevas tecnologías que les ayuden a aportar más valor a su negocio. Pero sabemos que en estos proyectos, a menudo nos encontramos con alguna resistencia y estrés. La gamificación puede hacer que el proceso sea más divertido y menos intimidante, ayudando a reducir la ansiedad y la resistencia al cambio. Al convertir tareas desafiantes en juegos, los empleados pueden enfrentar el cambio de una manera más positiva y abierta.

 

¿Qué lecciones pueden sacar los equipos de recursos humanos con este tipo de prácticas?

Los equipos de recursos humanos pueden extraer valiosas lecciones al implementar prácticas de gamificación en el entorno laboral. Podemos destacar:

La importancia de la personalización de las experiencias. No todos los empleados responden de la misma manera a las mismas motivaciones, por lo que personalizar las iniciativas gamificadas puede aumentar su efectividad.

La importancia del compromiso de los empleados para aportar valor al negocio; La gamificación demuestra que cuando las tareas y objetivos se presentan de manera atractiva y lúdica, los empleados tienden a estar más comprometidos y motivados. Y esto consigue mejorar la satisfacción del empleado, retener el talento y mejorar la productividad de los empleados, que es fundamental para el éxito de las empresas.

El valor del feedback inmediato; Al proporcionar retroalimentación en tiempo real, los empleados pueden ajustar su comportamiento y mejorar continuamente, consiguiendo mejorar el rendimiento y la productividad.

 

¿Qué cualidades de los trabajadores se ponen más en valor en este tipo de acciones? ¿Y carencias?

La gamificación en el entorno laboral puede resaltar tanto cualidades positivas como carencias en los empleados. Entre las cualidades que se ponen en valor podemos destacar:

Motivación intrínseca. Los empleados que tienden a destacar en entornos gamificados, están impulsados por la satisfacción personal de lograr objetivos y superar desafíos.

Competitividad saludable. Los empleados que disfrutan de los desafíos y buscan mejorar continuamente suelen responder bien a los elementos de competencia en la gamificación.

Colaboración y trabajo en equipo. Las habilidades de colaboración se ven realzadas, especialmente en juegos y actividades que requieren esfuerzo conjunto. Los empleados que pueden trabajar bien en equipo y comunicarse eficazmente suelen sobresalir.

Resiliencia y adaptabilidad. La capacidad de adaptarse a nuevas situaciones y superar fracasos es crucial en un entorno gamificado. Los empleados resilientes, que ven los desafíos como oportunidades para aprender, tienden a destacar.

Creatividad e innovación. Los empleados que pueden pensar de manera innovadora y aportar ideas frescas son altamente valorados en estos entornos gamificados.

La orientación a resultados Los empleados con una fuerte orientación a resultados, que están enfocados en alcanzar metas y objetivos, suelen prosperar en sistemas gamificados que recompensan el logro de hitos específicos.

Las habilidades de resolución de problemas. La capacidad de resolver problemas de manera efectiva y rápida es crucial. Los empleados que son buenos para analizar situaciones y encontrar soluciones eficientes se benefician del entorno gamificado.

 

Por otro lado, también pueden surgir carencias como:

La resistencia al cambio: Algunos empleados pueden mostrar resistencia a nuevas formas de trabajo y tecnologías, lo que puede dificultar la efectividad de la gamificación.

Falta de Motivación Intrínseca: Los empleados que dependen en gran medida de motivadores extrínsecos, como el dinero o el reconocimiento externo, pueden no responder tan bien a las recompensas simbólicas y los desafíos gamificados.

Competitividad Excesiva: Una competitividad excesiva puede llevar a un comportamiento poco saludable, como el sabotaje o la rivalidad extrema, que puede afectar negativamente la cohesión del equipo.

Dificultades para Trabajar en Equipo: Los empleados que prefieren trabajar solos y tienen dificultades para colaborar pueden encontrar desafíos en actividades gamificadas que requieren cooperación y comunicación.

Falta de Resiliencia: La gamificación implica superar fracasos y aprender de los errores. Los empleados que no manejan bien la frustración o que desisten fácilmente pueden tener dificultades para adaptarse.

Baja Capacidad de Innovación: Aquellos que no están acostumbrados a pensar de manera creativa o innovadora pueden tener dificultades en entornos gamificados que fomentan el pensamiento fuera de lo convencional.

Al identificar y abordar estas carencias, los equipos de recursos humanos podemos trabajar para desarrollar y potenciar las cualidades positivas en todos los empleados.

 

¿Varían mucho los resultados en función del juego?

Por supuesto. Los resultados de la gamificación pueden variar considerablemente en función del tipo de juego, las mecánicas utilizadas, el contexto organizacional, el perfil de los empleados y la forma en que se implementa y monitorea. Es crucial que los equipos de recursos humanos diseñen y ajusten sus estrategias de gamificación para alinearlas con las necesidades y preferencias específicas de sus empleados y su cultura organizacional, asegurando así que las iniciativas sean efectivas y sostenibles.

Dependiendo del objetivo o resultado que queramos obtener, tenemos que adaptar la estrategia de gamificación a implementar. Por ejemplo, si buscamos:

Aumento del Compromiso: Utilizaremos juegos que se centren en la colaboración y la participación activa para aumentar el compromiso general del equipo.

Mejora del Rendimiento: Implementaremos juegos competitivos con recompensas tangibles que pueden mejorar el rendimiento a corto plazo, pero necesitan ser equilibrados para evitar la presión excesiva.

Fomento de la Innovación: Recurriremos a juegos que incentiven la creatividad y el pensamiento fuera de la caja, para poder encontrar soluciones innovadoras.

Desarrollo de Habilidades: Utilizaremos simulaciones y juegos de rol que pueden ser efectivos para el desarrollo de habilidades específicas, como la resolución de problemas o la comunicación.

 

Conclusión

Todos sabemos que la gamificación está revolucionando la gestión de recursos humanos al hacer el trabajo más divertido y motivador. Añadir elementos de juego a las tareas diarias aumenta el compromiso, mejora el rendimiento y fomenta el trabajo en equipo. Además, ayuda en el desarrollo de habilidades y facilita la gestión del cambio. Sin embargo, para que sea efectiva, es crucial adaptarla a las necesidades de los empleados y objetivos de la organización y equilibrar la competencia con la colaboración. Con una implementación cuidadosa y ajustes continuos, la gamificación puede transformar el entorno laboral en algo dinámico y atractivo.